jueves, 29 de mayo de 2008

SOSTENIDO TRABAJO DE LA ASOCIACIÓN NACIONAL DE CIEGOS EN SANTIAGO DE CUBA

La virtud de brindar luz

Si de humanidad se trata no existe gestión más linda que la de hacer sentir útiles a las personas, que por causas naturales o accidentales no disfrutan de los colores del mundo al menos a través de sus ojos, de ahí la virtud de aquellos que tomando como lenguaje el amor hecho palabras y acciones son capaces de brindar ayuda a hombres y mujeres ciegos y con baja visión.

A propósito la visita de Control y Ayuda de la ANCI (Asociación Nacional del Ciego), al frente de la que estuvo el Dr. José Blanch Ferrer vicepresidente del Consejo Nacional de la organización, corroboró que se realiza un sostenido trabajo en la provincia oriental de Santiago de Cuba.

En el recorrido por varios de los municipios santiagueros, fueron supervisadas las siete secretarías que conforman la instancia provincial de la ANCI, presidida por José Cuevas Veranes, también miembro del Secretariado Nacional.

Cultura, Deportes, Sordos-ciegos e Informática se destacan entre los aspectos controlados obteniendo los siete la calificación de Bien, lo que muestra el desarrollo que tiene la provincia en tan noble tarea, donde se entrelazan los esfuerzos de Salud, Educación, Trabajo y Seguridad Social y todas aquellas personas y organismos sensibilizados con la necesidad de elevar la calidad de vida de personas ciegas y con baja visión.

Impactos importantes en la labor de las ANCI junto al Partido y el Gobierno en la provincia, lo tienen centros como la Escuela Especial para Ciegos y con Baja Visión “Antonio Fernández León” dirigida por Leticia Chacón Ramírez, donde están matriculados 116 niños desde preescolar hasta noveno grado. Para medir la importancia de este centro baste señalar que en este momento 81 egresados continúan estudios preuniversitarios, técnicos medios y universitarios, jóvenes a las puertas de una vida social plena.

También se destaca el Círculo Infantil Especial “Pulgarcito” donde son atendidos niños deficientes visuales y cuenta con un personal empeñado en no permitir que 51 infantes pierdan la ternura de una edad que nunca vuelve, además de prepararlos para ingresar a otro nivel de enseñanza.

La directora del círculo “Pulgarcito”, Yordanka Macías Pardo se enorgullece cuando dice que allí Logopedas, Psicopedagogos, Profesores de música y Educación Física, trabajan por corregir las deficiencias visuales de los niños; justificado orgullo, porque son puntales en la tarea de tomar el amor para mostrar el camino en la oscuridad a los que no pueden ver.

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