Elizabeth Palmeiro, esposa de Ramón Labañino
Guillermo Nova |
El próximo 13 de Octubre en Miami, un jurado tendrá que tomar en cuenta las instrucciones del tribunal de apelaciones de Atlanta y resentenciar a Fernando González, Antonio Guerrero y Ramón Labañino, entrevista en
Más allá del aspecto político o jurídico del caso de los Cinco, ¿que se siente desde el aspecto humano?
Una se siente muy mal, es terrible, porque mira para que te hagas una idea Ramón y yo llevamos casados 19 años, de los cuales más de diez los hemos pasado separados, por esta situación del trabajo que Ramón decidió un día dar un paso al frente para cumplir con misiones que ni
a mi me contó.
Durante todo este tiempo he vivido experiencias que me han servido a crecerme como persona, como madre, como mujer, como combatiente, como revolucionaria cubana, porque comparto las mismas ideas que Ramón, las mismas convicciones y esto también forma parte de todo el amasijo de sentimientos que se te unen para poder enfrentar situaciones difíciles, no sólo el estar enamorada de él.
Al cabo de tanto tiempo te digo que a veces me entran sentimientos de desesperación porque quiero que esto termine ya, necesito a Ramón al lado mío, las niñas lo necesitan a él, han pasado de niñas a adolescentes sin conocer a su padre, nada más que lo han visto en la prisión las veces que nos han dado visa.
¿Hasta ser descubierto, nunca sospechó de las actividades de su esposo?
Jamás me pasó por la mente las tensiones a las que él estaba sometido, él me mantuvo muy alejada de sus actividades, para mí su trabajo tenía más que ver con actividades para ayudar a Cuba en el período especial, para violar algunas normas del bloqueo, con medicamentos importantes.
La verdad que no tenía noción de nada, cuando me entero que Ramón esta preso y de lo que de verdad está haciendo, la mezcla de sentimientos fue grande, primero de sorpresa y luego me preguntaba como he podido estar con él sin imaginarme tantas tensiones que él tenía en su mente, tantas preocupaciones, la verdad que me lamenté de haberle peleado algunas veces, porque me cansaba de estar separados y le preguntaba de hasta cuando iba a tener ese tipo de vida. Cuando supe todo lo que estaba haciendo realmente, en ese momento me di cuenta de lo excepcional que era Ramón, de a cuantas cosas había tenido que renunciar.
En estos diez años de prisión ¿como han sido las visitas, el tema de los viajes y las visas?
Hemos recibido visa como promedio una vez al año, pero eso no significa que hayamos viajado todos los años, se han dado situaciones como en el 2006 que han llegado a dar la visa 18 meses después de solicitarla. Las visitas para nosotros es lo máximo, pero para nada son visitas familiares son más bien un castigo para el preso y la familia, no puedes llevarle un dulce, una fotografía.
Mis hijas son las que más han sufrido el ensañamiento cruel del gobierno de Estados Unidos, las han tratado con la misma crueldad que han tratado a los adultos, y no es justo porque ellos como cualquier preso tienen derecho a recibir sus visitas.
El cambio de administración en Estados Unidos, con Obama ¿puede significar algún cambio para el caso de los Cinco?
Cuando las elecciones en los Estados Unidos tuve la oportunidad de viajar allí, yo percibía mucho optimismo en el ambiente, muchos deseos de cambio en la sociedad norteamericana y eso un poco me embargó a mí al principio, pero nunca me hice muchas ilusiones con respecto al caso de nuestros familiares.
Ellos fueron encarcelados con el gobierno demócrata de Bill Clinton y fueron condenados con el republicano de Bush, por lo cual tanto demócratas como republicanos no significan ninguna variación con respecto a nuestro caso.
Confío más en el trabajo de mi gobierno, en el esfuerzo del pueblo cubano y en la solidaridad internacional.
Cuando ve la situación de su esposo y la de Posada Carriles ¿que siente?
Como mujer cubana pienso que hay muchos niños que perdieron a sus padres en un vuelo de Cubana de Aviación que Posadas planificó su explosión, yo al menos se que algún día Ramón volverá a casa, pero ellos no tienen ese consuelo, saber que se hace justicia sería algo que les reconfortaría a ellos.
Como esposa de Ramón, me pregunto como él puede estar preso por combatir el terrorismo, mientras que Posada que ha sido promotor de la muerte anda libre.